– Así lo defendieron este jueves en un encuentro de Proyecto Hombre y la Federación Latinoamericana de Comunidades Terapéuticas
MADRID, 13 (SERVIMEDIA)
El Plan Nacional sobre Drogas y la Unidad de Reducción de la Demanda de la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas (Cicad) de la Organización de los Estados Americanos defendieron este jueves a las comunidades terapéuticas como un «recurso clave» en la atención a las adicciones en la región y abogaron por «fortalecerlas».
Así lo aseveraron tanto el delegado del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Joan Ramón Villalbí, como la jefa de la Unidad de Reducción de la Demanda de la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas de la Organización de los Estados Americanos, Jimena Kalawaski, en la inauguración de un encuentro virtual organizado por Proyecto Hombre y la Federación Latinoamericana de Comunidades Terapéuticas (Flact) sobre la eficacia del tratamiento en adicciones desde una perspectiva integral.
Durante su intervención en el evento, en el que participan más de 400 inscritos de España, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, México, Nicaragua, Perú, Portugal o Venezuela, Villalbí afirmó que las comunidades terapéuticas ocupan «un espacio muy relevante en el abanico de recursos para atender a las adicciones».
«Son un recurso clave para muchas personas y han ayudado a muchas personas a encontrar el camino para vencer la adicción y recuperar la vida», sentenció, convencido de que la «evaluación y el conocimiento de la eficacia y de los factores que influyen en ella es la clave para la mejora continua de los dispositivos».
En este punto, apostó por «revisar, analizar, sacar conclusiones, plantear mejoras, probarlas, implantarlas, revisar de nuevo y analizar» como el «camino hacia la excelencia en un círculo y una espiral ascendente permanentes para tener cada vez servicios capaces de responder mejor a los problemas y de servir mejor a las víctimas de las adicciones».
Finalmente, Villalbí valoró que el encuentro de este jueves se presenta como un espacio «trasatlántico» que permitirá «generar la oportunidad de aprender unos de otros», algo que juzgó «absolutamente necesario» en el ámbito de las adicciones.
FORTALECER LAS COMUNIDADES TERAPÉUTICAS
En la misma línea, Kalawaski se decantó por «fortalecer técnicamente» el trabajo que se hace a través de la Flact con las diferentes comunidades con el fin de prestar «cada vez una mejor atención». «Donde no llega el Estado, en la mayoría de nuestros países, sí está presente la sociedad civil y las comunidades terapéuticas con un trabajo que lleva muchísimos años y que tiene muchísima evidencia y experiencia acumulada», sentenció.
En paralelo, aseveró que a la Cicad le «interesa» llevar a cabo un trabajo «muy cercano con la sociedad civil» para «poder avanzar en la región en lo que tiene que ver con más y mejores estándares de calidad y de eficacia» en torno a estos recursos y lamentó que, tras la pandemia, existe «bastante escaso apoyo estatal» en muchos países de Latinoamérica para las comunidades terapéuticas que, dijo, «son quienes absorben, en general, la mayoría de la demanda».
Por su parte, el presidente de la Flact, Jorge Olivares, consideró como un «eje central» de su trabajo el «mejoramiento continuo» en la «calidad» del tratamiento y el «respeto a los derechos de los usuarios» en las comunidades terapéuticas afiliadas a esta federación.
Junto a ello, se propuso «restablecer y afianzar» los «vínculos» con organismos internacionales referentes en esta área y avanzó que, con el «auspicio» de la Cicad, la Flact está trabajando en la articulación de una serie de estándares de calidad de comunidad terapéutica que se encuentra «en un proceso de revisión final, de edición» y que esperó poder presentar en la 28ª Conferencia de la Federación Mundial de Comunidades Terapéuticas, que se celebrará en Nueva Delhi del 2 al 4 de diciembre.
Además, avanzó que la federación está desarrollando un mapeo diagnóstico de la situación técnica y los recursos institucionales de las comunidades terapéuticas asociadas a las respectivas federaciones nacionales pertenecientes a la Flact, que concluirá en 2023 con un manual operativo de procedimiento para la «mejora continua» en el trabajo de comunidad terapéutica. Todo ello con el «objetivo central» de «unificar» los estándares de calidad en toda la región y «abordar los desafíos» que enfrentan las federaciones nacionales tras la pandemia.
Por último, el presidente de Proyecto Hombre, Alfonso Arana, se mostró convencido de que acciones como este encuentro «de intercambio» entre América latina y España «pueden ser muy interesantes y pueden redundar en que mejoren los tratamientos y que las personas vean mejorar su vida», y subrayó que permiten «compartir las mejores experiencias y los mejores trabajos» realizados por parte de la Flact y de Proyecto Hombre.