¿Sabes qué debes revisar antes de realizar la ITV? Te contamos dónde se localizan los defectos graves que imposibilitan superarla
Suele ser común que al finalizar un año se publiquen las cifras correspondientes al anterior, es decir, a finales de 2019 se conocen los datos correspondientes al año 2018 y puede que también los relativos al primer trimestre del ya finalizado 2019.
Y, como es de suponer, el sector automovilístico no es ajeno a lo anterior. Los vehículos más vendidos, las marcas preferidas por los usuarios, y también los datos relativos al mantenimiento e inspecciones de los vehículos. Concretamente y, tal y como indican desde ITV Madrid Sur, “del total de vehículos inspeccionados durante el 2018, cerca del 21% no superaron la Inspección Técnica de Vehículos (ITV) a la primera”.
Y es que, del Balance de 2018 elaborado por la asociación de empresas de ITV AECA-ITV se desprende que fueron realizadas un total de 20.714.602 inspecciones a vehículos, lo que supone un incremento del 2.52% respecto al año anterior. En dichas inspecciones se detectaron un total de 27.225.429 defectos, de los que 8.385.076 millones eran graves, imposibilitando superar la inspección.
Pero, ¿dónde se localizan principalmente estos defectos graves?
“El 24,9% de los defectos graves se detectan en el alumbrado y la señalización; el 20,1% se localizan en los ejes, los neumáticos y la suspensión de los vehículos; el exceso de emisiones contaminantes supone más del 16% de los defectos graves, mientras que más del 13% se localizan en los frenos” comentan desde ITV Madrid Sur.
Camiones, remolques, autobuses y furgonetas son los tipos de vehículos que presentan mayores defectos graves.
En segunda inspección, la mayoría acude a talleres para solucionar los defectos graves detectados en la anterior inspección, si bien existe un porcentaje, concretamente el 8,51% de los vehículos que no lograron superar esta segunda inspección, ni tampoco las posteriores.
Las Inspecciones Técnicas de Vehículos son necesarias para garantizar la seguridad en la carretera, usar un vehículo que se encuentre en perfecto estado es sinónimo de seguridad tanto para el conductor del propio vehículo como para viandantes y otros conductores que se crucen en su camino.