El Auditorio de Sanchinarro albergará este fin de semana la presentación de Hachè Costa de la que es la nueva creación escénica de gran formato que lleva por hilo conductor el abuso sexual y que ha sido producido contando con las Ayudas a la creación contemporánea del Ayuntamiento de Madrid, contando igualmente con la colaboración desinteresada de importantes casas internacionales del ámbito de la música como KRK-Gibson Spain, Initial Audio Berlin o IK Multimedia.

En una propuesta relacionada con el cine de suspense y misterio, “La Mano” busca despertar la conciencia del espectador al verse reflejado en su propio espejo.

Está escrita en consonancia con los tiempos actuales, donde el aislamiento ha acentuado los problemas psicológicos de gran parte de la sociedad y donde las fracturas estaban previamente latentes por no solucionar los conflictos personales a tiempo.

“Esta obra permite observar todos aquellos aspectos de nosotros mismo que desearíamos no haber visto jamás, nuestras fobias, nuestros deseos ocultos. Habla del perfil psicológico de una persona neurótica que repite una y otra vez los mismos comportamientos para tratar de evitar aquellos pensamientos que le resultan inaceptables” explica Costa.

Se trata así de una obra cuyo texto ha sido igualmente escrito por el compositor tomando como inspiración su propia experiencia, abordando temas como la culpabilidad, la ansiedad o la fractura psicológica que sufren las personas que han sido víctimas de entornos desestructurados, utilizando para ello una única actriz en escena, Emi Caínzos, que da voz a más de 15 personajes diferentes en la representación de una mente escindida en numerosas identidades independientes y contradictorias entre sí.

Hàche Costa es conocido por haber colaborado en proyectos audiovisuales como autor musical original, en la producción o diseño de sonido de proyectos tan importantes y reconocidos como la orquestación de películas como Campeones o Camino de Javier Fesser, aunque también ha hecho colaboraciones con periodistas y escritores de la talla de Manuel Rivas o Fernando Olmeda.