La fusión de la comida española con los platos o ingredientes más conocidos de los fogones internacionales es una tendencia gastronómica que ha ganado popularidad en los últimos años. Se trata de combinar elementos y técnicas culinarias de la cocina española con los sabores de otras culturas y tradiciones culinarias para sorprender a los paladares más exigentes en pequeños bocados.

“Esta tendencia surge de la creciente globalización y la apertura a nuevas influencias gastronómicas. Los chefs y restaurantes están experimentando con combinaciones creativas y únicas para ofrecer a los comensales experiencias culinarias innovadoras. En nuestra carta mezclamos tempuras con salsas orientales, gambones con licores extranjeros… se trata de dar un extra con ingredientes de lujo” explican desde Séptimo Arte Gastrobar.

De hecho, la fusión de la comida española e internacional puede manifestarse de diversas formas. Por ejemplo, se pueden incorporar ingredientes y técnicas de la cocina asiática, como el uso de salsas de soja, jengibre o algas en platos españoles tradicionales sorprendiendo con las texturas y colores. También se pueden fusionar sabores y estilos de cocina mediterránea, latinoamericana, africana o del Medio Oriente con la cocina española, creando platos que combinan lo mejor de ambos mundos donde las especias cobran verdadero protagonismo.

Esta tendencia ofrece una oportunidad para experimentar sabores y texturas diferentes, así como para ampliar los horizontes culinarios. “Refleja la diversidad cultural y la apertura a la mezcla de influencias en la gastronomía. Los chefs pueden incorporar ingredientes locales y de temporada con técnicas y sabores de diferentes partes del mundo, creando así una experiencia culinaria única y emocionante” comentan.

Todo un regalo para los sentidos que hacen de las salidas algo único, original y, sobre todo, un descubrimiento para quienes quieren salir de la rutina de los platos habituales.

Al vivir en un mundo totalmente globalizado es la evolución de la gastronomía natural, mezclar lo mejor de distintos rincones del mundo para crear nuevas recetas que sirvan de aliciente a la creatividad, a la cocina de autor y, sobre todo, que sigan apostando por productos de calidad y con base en kilómetro cero para darles un toque, forma de cocinado, sabor con salsas o demás que hagan viajar lejos.