MADRID, 02 (SERVIMEDIA)
Las futbolistas de la selección española Alexia Putellas, Misa Rodríguez e Irene Paredes ratificaron este lunes ante el juez de la Audiencia Nacional la versión de Jenni Hermoso sobre el beso que le dio le expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, en la celebración de la victoria en el Mundial de Australia y las posteriores presiones para que avalara la versión del directivo sobre los hechos. Todas han confirmaron que hubo presiones de Rubiales y de varios directivos de la federación a la jugadora y a su entorno para que dijera que el beso fue consentido.
Las tres estaban citadas esta mañana para declarar como testigos antes el juez central de instrucción número 1, Francisco de Jorge. Únicamente Misa, portera del Real Madrid, acudió en persona a la sede de la Audiencia Nacional, mientras que Paredes y Putellas declararon por videoconferencia desde la Ciudad de la Justicia de Barcelona.
Las futbolistas respondieron en especial sobre lo sucedido en el viaje de vuelta desde Australia y en el viaje que la selección realizó a Ibiza tras ganar el Mundial en el que presuntamente su compañera sufrió presiones por parte del entorno del expresidente para que dijera que el beso había sido consentido.
Fuentes presentes en la declaración aseguraron que los testimonios han sido coherentes entre sí y van en la misma dirección. Han explicado al juez cómo Rubiales llegó a suplicar llorando a Hermoso que apoyara su versión de los hechos y le pidió «por sus hijas» que dijera que el beso fue consentido. Incluso pidió a la jugadora que apareciera en un vídeo junto a él para despejar cualquier duda.
Las testigos aseguraron que las presiones a la campeona fueron continuas desde el primer momento tras la victoria en el Mundial y que se sustanciaron ya en el viaje de vuelta desde Australia. De hecho, afirmaron, las reuniones de los directivos de la RFEF fueron numerosas en el mismo avión.
En varias ocasiones los directivos llamaron a Hermoso aparte de sus compañeras para tratar de convencerla de que respaldara la versión de Rubiales y posteriormente hubo también presiones al hermano de Hermoso y a una amiga suya que las confirmaron al juez en su declaración de la semana pasada.
Las deportistas explicaron en la Audiencia Nacional que en un primer momento no calibraron la importancia de lo sucedido durante la celebración de la victoria y señalaron a Irene Paredes como la jugadora que comenzó a tomar conciencia de la importancia de los acontecimientos y a mostrar su disconformidad con lo que estaba sucediendo.
De igual modo, la creciente presión hizo sentir malestar a Hermoso a la que los servicios de prensa de la RFEF obligaron a aceptar la publicación de una nota de prensa que exoneraba a Rubiales, pero con la que ella nunca estuvo de acuerdo ni suscribió formalmente.
Las testigos han señalado con nombre y apellidos a las personas que protagonizaron estos episodios. En concreto hablaron del entonces seleccionador Jorge Vilda; del director de la selección española, Albert Luque, y el director de marketing, Rubén Rivera. Todos ellos están ya imputados en esta causa.
Las declaraciones de Alexia Putellas, Misa Rodríguez e Irene Paredes forman parte de la ronda de declaraciones que está realizando el juez por el ‘caso Rubiales’. El pasado lunes declaró el hermano de Jenni Hermoso, quien aseguró que Jorge Vilda le presionó. Su versión fue ratificada por una amiga de la jugadora que estuvo con ella en Ibiza y que también fue objeto de presiones.
El próximo 10 de octubre están citados en calidad de investigados Vilda y Rivera y el día 16 del mismo mes será el turno del director de la selección masculina, Albert Luque, también como investigado.
Ya el 20 de octubre, el magistrado escuchará como testigos al seleccionador del combinado nacional masculino, Luis de la Fuente; al director de Comunicación de la RFEF, Pablo García Cuervo, y al subdirector de Comunicación, Enrique Yunta. Y para el día 27 están citados el psicólogo de la selección femenina, Javier López Vallejo; el exdirector de gabinete de Luis Rubiales José María Timón, y el responsable de compliance de la selección, Javier Pujol.